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martes, 31 de diciembre de 2013

Transformar el pensamiento para un mejor 2014

“En el minuto en que alteres radicalmente tus pensamientos, te sorprenderás por la transformación rápida que esto traerá sobre las condiciones materiales de tu vida. Algunas personas imaginan que los pensamientos pueden mantenerse en secreto, mas no es así. Estos cristalizan con rapidez en un hábito y el hábito se materializa en circunstancia.”

James Allen, en IMAGINE SU VIDA (1906)

sábado, 28 de diciembre de 2013

Mi hijo no habla bien ¿qué hago?

Hace poco más de un año año llevé a mi hijo a la fonoaudióloga por problemas en el habla: sustituía letras, agregaba letras a las palabras, omitía los artículos(el, la)
Mi hijo en ese momento tenía 4 años y medio y me parecía realmente preocupante porque lo comparaba con mi hija de 2 años que hablaba casi mejor que él.
Tuve la buena oportunidad de llevarlo a una fonoaudióloga con experiencia, que luego de descartar problemas auditivos, me expresó que, aunque muchos colegas seguramente dirían que es una teoría antigua, existen DISLALIAS FISIOLÓGICAS que espontáneamente se mejoran con el desarrollo del niño siempre y cuando los padres le hablen correctamente. Sin embargo, inició el tratamiento. A los dos meses, con mucha práctica del niño y ayuda de mi esposo, que logró más atención que yo en el tema de ejercicios, mi hijo logró hablar "casi" perfectamente. Hoy tiene 6 años y no se le nota nada de aquello que tanto me desveló. La profesional tenía toda la razón.
Muchas veces como padres cometemos el error de pensar que todo lo que es parte del desarrollo le compete a los profesionales. No digo que no nos preocupemos pero este es un caso en el cual la naturaleza hace lo suyo. Sin tratamiento quizás habría evolucionado más lento...

Para saber más sobre dislalias:
http://www.apepalen.cyl.com/diversidad/diver/logope/habla/dislalias.htm


viernes, 27 de diciembre de 2013

Cuentos con valores : " La esquina del Año Nuevo"


Un cuento infantil  donde los protagonistas son los chicos.Recomendado para leer en familia.
Leerlo me hace revivir experiencias de mi niñez, repletas de juegos de barrio con amigos y primos.Me recuerda también que en las grandes necesidades hay grandes posibilidades de hallar más afecto, solidaridad, pureza, generosidad y amistad. Como digo siempre acerca de las Fiestas de Navidad, Fin de Año y Reyes: Agradezco las celebraciones en las que menos cosas materiales recibí porque, a  cambio, tuve mucho amor de mis seres queridos.




La Esquina del Año Nuevo 
por Laura Devetach


Si en el barrio había un juguete, ése era la olla de la abuela.Negra, panzona, increíble, colgaba de un paraíso atada con una soga.
La abuela vivía en la esquina, al lado del baldío. Y los chicos se hamacaban en la olla, se internaban en su panza y realizaban misteriosos viajes balanceándose en la rama.
Pero las cosas no andaban muy bien por aquellos tiempo. El dinero valía tan pero tan poco que, si se caía una moneda, la gente que tenía trabajo ni se agachaba a levantarla.
Sí, la gente que tenía trabajo. Porque muchísima gente  no tenía dónde trabajar. LA Navidad había venuido bastante arrugada y tristona, con poco para festejar.
Chabela y sus hermanos no habían tenido regalos. Ni Bety, ni los mellizos, ni casi nadie. Laurita y Gusti estaban un poquito mejor porque, como sus padres sí tenían trabajo, hicieron sangría para convidar a algunos vecinos y ellos recibieron unas zapatillas rojas con las que podían hasta volar.
Pero el Año Nuevo pintaba negro.
Para Chabela el Año Nuevo nunca había tenido mucha gracias porque era una fiesta sin regalos. Pero  Laurita decía que era divertido.
A veces los grandes se ponían tristones por esas cosas del año que se va y del año que viene y de que allá por año verde las cosas andaban mejor y etcétera.
Pero las noches se doraban con cohetes y había confites y as polleras bailaban en el aire. Gusti no entnedía por qué en Año Nuevo regalos no. Y andaba reclamando y, hasta hacía poco, el muy sí señor había conseguido un autito extra.
Pero esta vez, ni soñando.
Peor, esta vez andaba todo tan nublado que en las casas no había qué comer.
Chabela, Laurita y Gusti ya habían hecho sus averiguaciones por la cuadra. Doña Celia tenía fideos. La Abuela, repollo. Los Gutiérrez, cebollas y fideos. Y así, fideos más, fideos menos, hasta que se enteraron de que los siete hermanitos Pérez tenían dos cubitos de caldo y un pan.
Aquella tarde fue muy activa para los chicos.
Chabela habló con Laurita, Laurita lo mandó a Gusti y Gusti lo mandó a Pechecho, que dijo que sí aunque no entendió muy bien la cosa porque tenía dos años.Se pelearon y se amigaron con Raúl, Susana, Germán, Gustavo, los mellizos y MAría José.
Fueron y vinieron  haciéndose los buenitos, blanqueando los ojos si alguien les preguntaba qué hacían y, sobre todo, desapareciendo durante buenos ratos y comiéndose por eso buenos retos.
Por la tardecita se armó un gran lío en la cuadra. E cada casa faltaban fideos, el repollo, las cebollas y los etcéteras. Las mujeres entraban y salían con los brazos para arriba. Y los hombres miraban para arriba con los brazos para abajo. ¡Qué cosa!
La gente fue a la despensa de doña Nely a comprar "anotados", otros fideos. Pero doña Nely descubrió que le faltaban algunas latas de conservas.
Y todo así, como hormiguero antes de la lluvia, cuando alguien gritó:
- ¡Fuego en el baldío! ¡Miren el humo!
Y allí fueron corriendo.
¿Y qué vieron?
En la semioscuridad de la última noche del año, una fogata bailaba loca. Y sobre la fogata, como una joya muy rara, la olla de la abuela chispeando y cantando con la panza llena de cositas cortadas que despedían muy buen olor.
Todo se doraba alegremente en el chasquido del aceite, y los chicos, tiznados, color manzana, color nervioso, revolvían, cortaban, repartían, resoplaban, en una extraña danza del fuego.
Todos los miraron quietos. Los que tenían los brazos para arriba los bajaron y los que tenían los brazos para abajo los subieron justo a la altura por donde rueda una lágrima.
Pero no se detuvieron mucho en eso. Había que ir poniendo la mesa. Una mesa hecha de muchas mesas. Una mesa larguísima, justamente en la esquina del Año Nuevo.

Bibliografía:

Devetach, Laura. La esquina del Año Nuevo. En Una caja llena de Buenos Aires. Colihue, 1996.

¿Qué libros son recomendables para los chicos según su edad?

Literatura infantil y juvenil

No existe una receta exacta acerca de qué dar de leer en cada etapa pero sí  recomendaciones de buena literatura. Adjunto un listado que compartió mi profe de Literatura Liliana S.  al cual le agregué algunas sinopsis de libros en resaltador fucsia.
Algunos son recomendados por tratarse de cuentos acerca de lo fantástico, o bien , que tratan temas complejos o de misterio o terror que son abordados por los autores en libros dirigidos a los niños y jóvenes. 

LIBROS PARA ESCUELA PRIMARIA, PRIMER CICLO (6-8 años)
ACCAME, Jorge. ¿Quién pidió un vaso de agua?. Sudamericana.
¿Quién pidió un vaso de agua en medio de la noche?
¿Quién se cayó de sopetón al cielo?
¿Y quién cruzó navegando un gran plato de sopa?
Tres cuentos con suspenso, emoción y un poco de risa.
BASCH, Adela. Oiga, chamigo Aguará. Colihue.
BORNEMANN, Elsa. Lisa de los paraguas. Latina.
BORNEMANN, Elsa. Tinke Tinke. Plus Ultra. *
CABAL, Graciela. Jacinto. Sudamericana.
CABAL, Graciela. Miedo. Sudamericana.
CANELA. Barco pirata. Sudamericana.
CANELA. Marisa que borra. Sudamericana. 
Marisa nos muestra que para borrar las cosas que no nos gustan hace falta solo un poco de imaginación. Después emprende un viaje rarísimo sin saber que, buscándola, mama volverá a mirar, oler, escuchar y descubrir laciudad en la que viven.
DEVETACH, Laura. Canción y pico. Sudamericana. *
DEVETACH, Laura. El ratón que quería comerse la luna. Sudamericana.
DEVETACH, Laura. Lombriz que va, lombriz que viene. Sudamericana.
DEVETACH, Laura. El garbanzo peligroso. Colihue.
DEVETACH, Laura. El hombrecito verde y su pájaro. Colihue.
DEVETACH, Laura. ¿Quién se sentó sobre mi dedo? (Cuentos del pajarito remendado). Colihue.
;
DEVETACH, Laura y ROLDÁN, LAURA: ¡Ay, tarara!, Altea;
DEVETACH, Laura y ROLDÁN, LAURA: Las 1001 del garbanzo peligroso, Altea;
DEVETACH, Laura y ROLDÁN, LAURA: La marca del garbanzo, Altea;
FISCHER, Carmela. Un do li tuá. Rondas y canciones tradicionales infantiles. Ameghino. *
;
GRAU, Didi y RODRIGUEZ, Elba: Un lugar cómodo, cómodo, Edelvives;
GIARDINELLI, Mempo. Luli, una gatita de ciudad. Alfaguara.
ISTVANSCH. Trabajo de autor. a-Z.
MACHADO, Ana María. Yeca, el tatú. Sudamericana.
;
MACHADO; Ana María: Gente, bichos, plantas, el mundo que me encanta, Planeta; MAINÉ, Margarita. Cartas a un gnomo. Sudamericana.
MAINÉ, Margarita. Un gran resfrío. Sudamericana.
MONTES, Graciela. Las velas malditas. Alfaguara.
MONTES, Graciela. Más chiquito que una arveja, más grande que una ballena. Sudamericana.
: PÉREZ AGUILAR, Graciela y COLOMBO, Natalia: Pequeño dragón aprende a volar, Edelvives; RODARI, Gianni. Cuentos por teléfono. Juventud.
ROLDÁN, Gustavo. Historias del piojo. Norma.
ROLDÁN, Gustavo. La noche del elefante. Colihue.
ROLDÁN, Gustavo. El monte era una fiesta. Colihue.
ROLDÁN, Gustavo. Sapo en Buenos Aires. Colihue.
SCHUJER, Silvia. Abrapalabra. Sudamericana. *
SCHUJER, Silvia. Palabras para jugar con los más chicos. Sudamericana.
SCHUJER, Silvia. Cuentos y chinventos. Colihue.
WALSH, María Elena. Cuentopos de Gulubú. Sudamericana.
WALSH, María Elena. Tutú Marambá. Espasa Calpe. *
WALSH, María Elena. Versos tradicionales para cebollitas. Sudamericana. *
WOLF, Ema. Hay que enseñarle a tejer al gato. Libros del Quirquincho.
ZIRALDO. El gusanito de la manzana. Emecé.
ZIRALDO. Flicts. Emecé.


LIBROS PARA ESCUELA PRIMARIA, SEGUNDO CICLO (9-12 años)

ANDERSEN. El traje del emperador. (Cuentos del pajarito remendado). Colihue
BLANCO, Cecilia: Fábulas de mayor a menor, Uranito; BORNEMANN, Elsa. El libro de los chicos enamorados. Norma.*
BORNEMANN, Elsa. Corazonadas. Alfaguara. *
BORNEMANN, Elsa. Socorro 10. Norma.

: Historias que van desde una abuela malvada
que odia a sus nietos, hasta un niño-robot fabricado
para explotar en su propio colegio. Doce cuentos "de
miedo" presentados y ordenados por el mismísimo
Frankenstein. Un clásico de la literatura argentina para
chicos, en su edición definitiva


BORNEMANN, Elsa. No somos irrompibles. Alfaguara.

Un libro con doce historias de amor entre
chicos, con cuentos que hablan de celos, peleas,
amistad y romances imposibles, una especie de
continuación del Libro de los chicos enamorados de
la misma autora.

BORNEMANN, Elsa. La edad del pavo (12 cuentos) Alfaguara.
CABAL, Graciela. Las dos tortugas. Sudamericana.
CALIFA, Oche. Canciones sin corbata. Sudamericana. *
CALIFA, Oche. La vuelta de Mongorito Flores. (Cuentos del pajarito remendado). Colihue
CARROLL, Lewis. Alicia en el País de las Maravillas. Río Nuevo.
DEVETACH, Laura. Una caja llena de. Colihue.
DEVETACH, Laura. Versos del pozo redondo. Colihue. *
ECCO, Umberto. Los tres astronautas. De la Flor.
FALCONI, Ma. Inés. Niños: las brujas no existen. (Cuentos del pajarito remendado). Colihue
GARCÍA LORCA, Federico. Mariposa del aire. Colihue. *
GRIMM. Los músicos de Bremen (Cuentos del pajarito remendado). Colihue.
HEREDIA, María Fernanda. Amigo se escribe con H. Norma.
LINARES, Laura y WOLF, Ema. Perafán de Palos. Alfaguara.
MARIÑO, Ricardo. Cuento con ogro y princesa. Colihue.
MARIÑO, Ricardo. Cuentos ridículos. Sudamericana.
MONTES, Graciela. Doña Clementina Queridita, la achicadora. Colihue. 
El vecindario todo está alborotado porque, cada vez que Doña Clementina abre la boca, aquel a quien se dirije se vuelve más chiquito. Como si fuera poco, Macedonio tiene una casa tejida, don Ramón habla con un pez que salió de la canilla y los cabellos de Julia no dejan de crecer... Cuentos donde ocurren cosas tan fantásticas que no se pueden creer

MONTES, Graciela. La familia Delasoga. Cuentos del Pajarito Remendado. Colihue
.
Esta familia quiere estar tan pero tan unida que sus miembros están atados con sogas los unos a los otros. Es lindo estar ligados a papá y mamá, a los hermanitos, pero trae muchas dificultades prácticas a la hora de desplazarse. Y a veces se quiere dar un paseíto independiente. La solución es darse cuenta de cuál es la verdadera unión.
MONTES, Graciela. Tengo un monstruo en el bolsillo. Libros del Quirquincho.
MUJICA LÁINEZ, Manuel. El hombrecito del azulejo. El pastor del río. Sudamericana.
PESCADOR, Pipo. A la ronda, ronda. Espasa.
PESCADOR, Pipo. El libro loco (te rompe el coco). Espasa. *
QUIROGA, Horacio. Cuentos de la selva. Losada.
RAMOS, Ma. Cristina. De papel te espero. Sudamericana. * RAMOS; María Cristina: La luna lleva un silencio, Aique *; 

Como ocurre con los buenos discos, con la poesía de María Cristina Ramos lo mejor comienza al rato. Es decir; dejar que la lectura avance, que los sonidos vayan adueñándose de esa caja de resonancia en la que se transforma el lector, resultan operaciones imprescindibles para ingresar en todo un universo poético que abarca seis libros pero que pueden leerse como uno solo.
Se trata de una obra que apela a recursos tradicionales de la poesía (hoy relegados casi exclusivamente al mundo de lo infantil), como son la rima y la medida, pero que no se deja atrapar por ellos, sino por el contrario, los utiliza como herramientas para generar un mundo sonoro dentro del cual, quien resulta atrapado, es el lector


RODARI, Gianni. Cuentos por teléfono. Juventud.
ROLDAN, Gustavo. Crimen en el arca. Alfaguara.
ROLDAN, Laura. La discusión. Cuentos del pajarito remendado. Colihue.
SHUA, Ana María. Expedición al Amazonas. Sudamericana.
SCHUJER, Silvia. 350 adivinanzas para jugar. Sudamericana.
SCHUJER, Silvia. Palabras para jugar. Sudamericana.
SCHUJER, Silvia. Oliverio junta preguntas. Sudamericana.
SILVEYRA, Carlos. El insólito viaje a Singapur de Mardoqueo Gómez, inventor. Santillana.
TALLON, José Sebastián. Las torres de Nuremberg. Colihue.
VILLAFAÑE, Javier. Teatro para chicos. Títeres y actores. Colihue.
WALSH, Ma. Elena. Cuentopos de Gulubú. Espasa Calpe.
WALSH, Ma. Elena. Dailan Kifki. Sudamericana.
WALSH, Ma. Elena. El reino del revés. Espasa. *
WALSH, Ma. Elena. Juguemos en el mundo. Sudamericana. *
WALSH, Ma. Elena. Tutú Marambá. Espasa Calpe. *
WALSH, Ma. Elena. Zoo Loco. Espasa Calpe. *
WOLF, Ema. ¡Silencio, niños! Y otros cuentos. Norma. 


WOLF, Ema. La sonada aventura de Ben Malasangüe. Alfaguara.
WOLF, Ema. La aldovranda en el mercado. Sudamericana.
s: Ustedes decidan qué es peor: encontrarse con
una planta carnívora en el mercado, comprar un
fantasma inútil, escuchar una historia de Lucy Mortaja,
soportar un aparecido en el patio, o ser envenenado por
el siniestro chino amarillo patito. Todo esto lo
encontrarán en el libro. Elijan pronto, que las malas
ofertas se acaban enseguida.

WOLF, Ema. Los imposibles. Sudamericana.

LIBROS PARA ESCUELA SECUNDARIA (12-17 años)
A.A.V.V. Mi primer libro de poemas. Aique. *
AGUIRRE, Sergio. Los vecinos mueren en las novelas. Norma.

ANÓNIMO. Canciones celtas. Vergara.*
ANÓNIMO. Tristán e Iseo. Cántaro.
AMADO, Jorge. El capitán de ultramar. Emecé.
ASIMOV, Isaac. Jóvenes monstruos. Altea.
ASIMOV, Isaac. Los robots y el imperio. Emecé.
BAUM, Frank. El mago de Oz. Orión.
BIERCE, Ambrose. Diccionario del Diablo. Colihue.
BIOY CASARES, Adolfo. La invención de Morel. Emecé.
BIRMAJER, Marcelo. El alma al diablo. Norma.
BODOC, Liliana. Los días del venado. Norma.
BORGES, Jorge Luis. Ficciones. Emecé.
BRADBURY, Ray. Crónicas marcianas. Minotauro.
CABAL, Graciela. Cuentos de miedo, de amor y de risa. Aique.
CALVINO, Italo. El barón rampante. Destino.
CHESTERTON, Gilbert. El candor del Padre Brown. Cántaro.
CONRAD, Joseph. Tifón. Edic. del Sol.
CORTAZAR, Julio. Final de juego. Sudamericana.
DAHL, R. Matilda. Alfaguara.
DARIO, Rubén. Cuentos fantásticos. Alianza.
DE SANTIS, Pablo. Páginas mezcladas. Colihue.
DE SANTIS, Pablo. El inventor de juegos. Alfaguara.
DE SANTIS, Pablo. Lucas Lenz y el museo del universo. Alfaguara.
DEFOE, Daniel. Robinson Crusoe. Edic. del Sol.
DICK, Philip. ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? Edhasa.
DRENNEN, Olga. Leyendas que eran y son. El Ateneo.
EL DIARIO DE ANA FRANK. Plaza y Janés.

ENDE, Michael. La historia interminable. Alfaguara. 

ENDE, Michael. Momo. Alfaguara. 
En las ruinas de un anfiteatro vive una niña
llamada Momo, que posee la habilidad extraordinaria
de oír de verdad. Escucha de una manera tan especial
que es capaz de encontrar las respuestas a los
problemas de quien habla con ella, de hacer amistades
e inventar juegos muy divertidos. Los hombres grises
quieren robar uno de los bienes más preciados que
poseen las personas: su tiempo. Momo intentará
ayudar a la gente a humanizar sus vidas

GARCIA MARQUEZ, Gabriel. Relato de un náufrago. Sudamericana.
GARCIA MARQUEZ, Gabriel. Crónica de una muerte anunciada. Sudamericana.
GOLDING, W. El señor de las moscas. Minotauro.
GOSCINNY Y DARGAUD. Asterix. Grijalbo.
IRVING, Washington. El jinete sin cabeza. Estrada.
IRVING, Washington. Cuentos de la Alambra. Norma.
JAMES, Henry. Otra vuelta de tuerca. Anaya.
KIPLING, Rudyard. Kim. Edic. del Sol.
LONDON, Jack. Colmillo blanco. Robin Hood.
MACHADO, Antonio. Poesías completas. Círculo del buen lector. *
MACHADO, Antonio. Qué fácil es volar. Colihue. *
MARIÑO, Ricardo. El último planeta. Sudamericana.
MARTÍ, José. El libro de oro de los niños. Uthea.
MAUPASSANT, Guy de. Bola de sebo.
MAUPASSANT, Guy de. Cuentos fantásticos. Longseller.
MELVILLE, Herman. Moby Dick.
Edic. del Sol.
MOLIÈRE. El burgués gentilhombre. Cántaro.
MONTES, Graciela. Los caballeros de la mesa redonda. Colihue.
MONTES, Graciela. Mitología griega. Colihue.
MONTES, Graciela. Otroso. Alfaguara.
MONTGOMERY, L. M. Anne, la de los tejados verdes. Emecé.
NERUDA, Pablo. Las preguntas. Colihue. *
NERUDA, Pablo. Odas elementales. Losada. *
ORGAMBIDE, Pedro. Las botas de Anselmo Soria. Colihue.
PERRAULT, Charles. Cuentos de mi madre oca. Gramón - Colihue.
POE, Edgar Allan. Los crímenes de la calle Morgue. Alianza.
RAMOS, Ma. Cristina. Ruedamares, pirata de mar bravía. Norma.
SAINT EXUPERY, Antoine. Vuelo nocturno. Emecé.
SAKI Y OTROS. El ahijado de la muerte. Colihue.
SALGARI, Emilio. Sandokan.
SHUA, Ana María. La fábrica del terror. Sudamericana

. Las puertas están abiertas. Las máquinas funcionando. Pueden ustedes pasar a La fábrica del terror. Lo traen de la mano los zombies y los hombres-lobo, las serpientes y la magia negra, las tumbas y los fantasmas.
Todos los recursos que los hombres usaron para asustarse unos a otros, desde la prehistoria hasta las últimas películas de terror, en estos ocho cuentos que harán temblar a sus lectores
.

SCHUJER, RAMOS, LORCA y otros. 18 de amor. Sudamericana.
SENDRA. Yo, Matías. De la Flor.
SERRAT, Joan M. Mediterráneo y otras canciones. Espasa. *
SHELLEY, Mary. Frankenstein. Ediciones B.
SORIANO, Osvaldo. Triste, solitario y final. Sudamericana.
STEVENSON, Robert Louis. El diablo en la botella. S. M.
STEVENSON, Robert Louis. El extraño caso del Doctor Jekyll y el señor Hyde. Estrada.
STOCKER, Bram. Drácula. Minotauro.
TOLKIEN, J.R.R. El hobbit. Minotauro.
TWAIN, Mark. Diarios de Adán y Eva. Cántaro.
TWAIN, Mark. Las aventuras de Huckleberry Finn. Alianza.

Huckleberry Finn, un niño decidido y
aventurero, escapa de su alcohólico y egoista padre a
bordo de una balsa de troncos. En su viaje a lo largo del
Mississipi, le acompaña Jim, un esclavo negro que ha
escapado al oir que pensaban venderlo. Juntos afrontan
todo tipo de dificultades en su huída, al tiempo que
crece entre ambos una gran amistad
WELLS, H. G. La máquina del tiempo. Cántaro.
WELLS, H.G. El hombre invisible. El Ateneo.
WILDE, Oscar. Cuentos completos. Austral.
WOLF, Ema. Maruja. Sudamericana.


jueves, 26 de diciembre de 2013

¿Es posible ser una madre " lo suficientemente buena"?

El médico pediatra y psicoanalista Donald Winnicott hizo estudios acerca de los primeros tiempos de la relación madre-hijo.Si bien escribió sus apreciaciones en el siglo pasado, sus indicaciones me parecen cada vez más vigentes.

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La madre lo suficientemente buena es la que es capaz de identificarse con el bebé para brindarle la satisfacción de sus necesidades y al mismo tiempo darle progresiva autonomía al tiempo que crece. Qué labor difícil y a la vez, qué necesaria. Podemos satisfacer las necesidades de nuestros hijos y, dentro de ella está la necesidad cada vez mayor de independencia, del poder explorar por sí mismo, de ensayar y equivocarse para aprender. Somos espectadores del desarrollo de nuestros hijos.Aún cuando alguno de ellos naciera con dificultades o las adquiriera a lo largo de su vida, nuestra función es las de ser un importante sostén de su vida. Lo que no significa que podamos vivir por ellos,ni aprender lo que ellos requieren por sí mismos. Qué maravilloso es entonces saber que no hay recetas para ver crecer a los niños. Sólo se requiere una madre (y yo diría también un padre) lo suficientemente buena en adaptarse a su hijo, en darle espacio, tiempo, aire,respuestas, ánimo,  para que pueda desarrollarse. Y considero que a veces el satisfacer las necesidades de alimento, vivienda, vestido, educación no son tan importantes como la de prepararlo para ser autónomo en todo aspecto de la existencia.

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Para finalizar, comparto mi experiencia como madre de una hija con PBO (Parálisis Braquial Obstétrica), una discapacidad física parcial pero permanente.LA lesión en los nervios del plexo braquial, que da movilidad y sensibilidad al cuello,hombro y miembros superior, fue producto de una mala praxis médica. Ella está en rehabilitación desde los quince días de vida pero el seguimiento de su evolución es de por vida. Al nacer mi niña me sentí incapaz de afrontar el desafío de rehabilitarla con ejercicios en mi hogar. Parecía como si jamás fuera a ver los resultados. Con el tiempo descubrí que si observaba mejor a mi bebé, si ponía mis esfuerzos y energía en cumplir todo lo posible para mejorar la situación y si mejoraba mi vínculo con ella cada día habría buenos resultados. Lo que siguió fueron pequeños logros diarios.Hoy en día mi hija tiene sus dificultades pero de tener su brazo inmóvil cayendo al lado de su cuerpo tiene la movilidad de un 80 % en su brazo. Esta lesión en los nervios puede tener una recuperación espontánea , como la de mi bebe, o no.

Para mayor información de la PBO consultar: https://es-es.facebook.com/pages/Par%C3%A1lisis-Braquial-Obst%C3%A9trica-PBO-Argentina/102529469419

Lo que rescato de esta lucha constante por la rehabilitación, es que al intentar contactarme con mi hija y estar pendiente de sus necesidades las 24 horas del día, aun cuando trabajo, me ayuda a encontrar cada vez nuevas alternativas para su salud. No es la misma necesidad de acompañamiento que ella requirió al iniciar a gatear, a caminar, a comer sino que ahora que tiene casi cuatro años, necesita ser autónoma pero aplicar todos las indicaciones de su fisiatra y terapista. Veo diariamente la necesidad de darle su lugar para crecer , siendo su apoyo pero nunca debilitando su capacidad de decidir ni forzándola a cumplir. Esto requiere grandes estrategias de mi parte y colaboración familiar. Pero agradezco la oportunidad de ver que mi pequeña tiene su propia fuerza y motivación para superar sus dificultades aun a su corta edad.

Si lo que Winnicott quiso decir es que cualquier madre puede ser buena si se enfoca en su hijo, aun sin ser instruida ni teniendo ninguna preparación, entonces el mundo está lleno de muy buenas mujeres que han decidido ser madres y cumplen bien su labor siendo sostén y base de crecimiento y exploración del mundo para sus niños.

Aprendí que no existe la madre perfecta, sino la madre perfecta para ese hijo, o para ese momento preciso en la vida del hijo, quien le ofrece lo adecuado cuando él realmente lo necesita.


Bibliografía:

 Winnicott, D. (1984). La familia y el desarrollo del individuo. Buenos Aires. Paidós.
 --------------(2005). Realidad y Juego (1971). Buenos. Aires: Gedisa. 




lunes, 23 de diciembre de 2013

En defensa de las bibliotecas!

Como todos saben, estaré finalizando mi carrera de Bibliotecaria Escolar en el año 2014.
Decidí escribir este artículo porque noto que la opinión popular respecto de las bibliotecas es bastante negativa. Por que? Se piensa que con los avances tecnológicos no se necesitan  libros, por lo tanto, tampoco las bibliotecas.
Justamente frente a este desafío, la formación de bibliotecarios en la actualidad se centra en la ALFIN : Alfabetización Informacional. Ésta incluye todas las competencias necesarias para buscar, seleccionar, sintetizar, analizar , utilizar y comprender información en cualquier soporte que se encuentre(papel, digital) y proveniente de cualquier fuente y/ o canal. Es por eso que no creo para nada agotado el trabajo del bibliotecario, siendo éste quien en gran medida mediará entre los alumnos y comunidad en general y la información.
 No se trata sólo de leer libros sino de utilizar información para generar conocimiento.
Así que no se trata tampoco de la tradicional biblioteca de grandes ficheros y libros a limpiar, sino de bibliotecas electrónicas, digitales y virtuales que están haciendo su aparición y que podemos aprovechar.
Realmente me encanta esta nueva profesión que he abrazado y mi defensa a favor de un pueblo que valora la biblioteca es fundamental. Valoramos nuestro capital cultural para crear nuevas producciones.
Lejos está mi época de lectora de biblioteca de pueblo que sacaba tres o cuatro ejemplares para leer en casa.Hoy en día se suman libros digitales, periódicos on-line y mil recursos más. Pero lo que aprendí de chica al tener tantos libros al alcance fue que no podemos abarcar todo el conocimiento de una vez. Debía buscar un  texto, leerlo, releerlo, asimilarlo y luego podía pasar a leer otro. De lo contrario mi cabeza era un caos. Lo mismo sucede a mi entender con el cúmulo de información existente en el  mundo actual sea en forma impresa o digital por el auge de Internet. Por eso nos formamos como bibliotecarios muchos de mis compañeros y yo, para serte de utilidad en seleccionar paso a paso lo que te ayudará a asimilar tu propio conocimiento.

Gracias por valorar esta hermosa carrera y estoy a disposición. Que nunca mueran las bibliotecas, para que se cumpla lo que sugiere el gran Gianni Rodari en el prólogo de su Gramática de la fantasía : " el uso total de la palabra para todos, me parece un buen lema, de bello sonido democrático. No para que todos sean artistas, sino para que nadie sea esclavo"

domingo, 22 de diciembre de 2013

¿Fábulas en contra de la imaginación?



Uno de las fábulas de Esopo que leí de pequeña trataba de la lechera que, teniendo un cántaro de leche y yendo de camino al pueblo a venderla, cayó en "locas imaginaciones" acerca de todo lo que haría con el dinero a recibir. Luego de soñar mil oportunidades, incluso el hacerse rica, torpemente tropieza y su cántaro se rompe en mil pedazos. La moraleja sonaba en mi mente como si intentara decir que se debe razonar más y soñar menos.Que se debe esperar a tener resultados antes de proyectar.

Busqué una parte de la historia, en una de sus versiones, para recordar:

"¡Oh loca fantasía!,
¿Que palecios fabricas en el veinto!
Modera tu alegría;
no sea que saltando de contento, 
al contemplar dichosa tu mudanza,
quiebre tu alcantarilla la esperanza.
No seas ambiciosa
de mejor o más próspra fortuna;
que vivirás ansiosa
sin que pueda saciarte cosa alguna.
No anheles impaciente el bien futuro:
mira que ni el presente está seguro."

(extraído de:http://www.materialesdelengua.org/LITERATURA/TEXTOS_LITERARIOS/CUENTOS/contar/lechera.htm

En principio esta historia no se creó específicamente para niños. Sin embargo, su utilización didáctica y pedagógica  desde el siglo XVII es bien conocida. Si lo más evidente que poseen los niños es imaginación y poder en el mundo de la fantasía...¿por qué aplicarles la norma de la fábula en la vida real? Es decir, ¿por qué no permitirles soñar con un mundo diferente, posibilidades enormes, realizaciones imposibles? ¿Por qué los adultos nos esforzamos tanto por hacerlos "caer en la realidad"?

No puedo decir que la fábula que leí tanto me haya influido para mal pero no la utilizaría para enseñarles nada a mis hijos. La fantasía inocente que ellos poseen es la raíz de toda su creatividad. Al contrario, mi deseo es dejar que pierdan vasijas por el camino si eso significa que han desarrollado su mente, su potencial y su espiritualidad por el camino.
Y sí, hay que aprovechar el presente pero también construir desde él el futuro que deseamos.

Convertir y convertirse en LECTOR

Dice Beatriz Sarlo :

 "Leer: una de las operaciones más complejas. No es sorprendente que adquirir un manejo de la máquina de leer sea difícil y, en periodos de mutación cultural, se corra el riesgo de perder la máquina y la destreza para manejarla. Para decirlo con algunas comparaciones evidentes: es más difícil aprender a leer que aprender a conducir un coche o una bicicleta, jugar al tenis, cocinar comida china, andar a caballo o tejer. Por supuesto, aunque vale la pena recordarlo, es más difícil aprender a leer que a mirar televisión."
"Todavía no se ha inventado nada más allá: los hipertextos, Internet, los CDROM y los programas de computadora suponen la lectura, obligan a la lectura y no son más sencillos que los libros tal como los conocimos hasta hoy. Quien afirme algo diferente nunca vio un CDROM, ni un programa de hipertexto, o quiere engañarnos haciendo barato populismo tecnológico. Si el futuro son las computadoras, la lectura es indispensable"

(extraído de:  SARLO, Beatriz. Instantáneas. Buenos Aires: Ariel, 1996. Págs. 193-195)
 
El valor de la lectura es cada vez más necesario.Y no sólo lectura en cuanto a decodificación y expresión verbal, sino la lectura como entrada al mundo del pensamiento, la imaginación, el mundo del "como si", el diálogo texto - mundo interno.

Convertir a nuestros hijos en lectores no es algo de un día para otro, es un proceso largo que depende de varios factores.

1) Convertirse uno mismo en LECTOR : El ejemplo de padres y/o adultos que disfrutan leyendo es un buen incentivo para los pequeños lectores.

2)Proporcionar un medio alfabetizador: no sólo tener libros a mano, sino buena y variada literatura.

3) La lectura es un acto libre y lúdico: nunca obligar a leer literatura y a realizar "algo" después. La lectura de textos literarios se disfruta mientras uno permanezca en ese espacio-tiempo creativo, íntimo, imaginario.

Tres simples propuestas para empezar a formar un LECTOR ACTIVO Y AUTÓNOMO, responsabilidad compartida entre la familia, la escuela y demás instituciones o personas que se relacionan con el mundo del libro.